Quimeras

En la mitología griega, la Quimera era un monstruo que tenía tres cabezas: una de león, otra de macho cabrío que le salía del lomo, y la última de dragón que nacía en la cola. Según la leyenda, su boca de dragón lanzaba grandes llamaradas de fuego que causaban estragos allá por donde pasaba hasta que el héroe Belerofonte, montado en el caballo alado Pegaso, dio muerte al monstruo con sus flechas. En lengua española, una quimera es aquello que se propone a la imaginación como posible o verdadero, no siéndolo. Hoy hablaremos de las quimeras biológicas, unas entidades que siendo reales parecen fruto de la imaginación.

Cuadro Quimera, atribuido al pintor veronés del s. XVI Jacopo Ligozzi. Museo del Prado. Madrid.

La República del Guano

Dos décadas después de la independencia de Perú comenzaron a hacerse públicos los datos oficiales sobre exportación de guano, un abono natural derivado de los excrementos de ciertas aves marinas. Como era un recurso abundante y preciado, las cifras no pararon de crecer hasta 1870, año en el que se exportaron 728 mil toneladas de este abono. Tan valioso llegó a ser este mercado para el país que Perú fue considerado como “la república del guano”. Durante aquella época se vivieron dos guerras por el control de la veintena de islas peruanas donde se generaba este rico abono, pues España, Chile y Estados Unidos quisieron apropiarse de esos espacios.

Recolectores de guano en la isla Macabi (Perú). Foto de E. Benavides

Joyas biológicas

Cuando los dinosaurios todavía dominaban los mares y los continentes de la Tierra, un pajarillo recién salido del cascarón quedó atrapado en la resina de una conífera y casi la mitad de su cuerpo apareció 99 millones de años después incrustado en un trozo de ámbar. Muy a su pesar, se convirtió en el fósil aviar encerrado en ámbar más completo descubierto hasta la fecha. El ámbar es la única piedra semipreciosa de origen vegetal. En la Antigüedad se pensaba que poseía propiedades místicas o mágicas, y fue utilizado por muchas culturas como talismán o remedio medicinal. Hoy en día es muy popular en joyería y decoración, y es también un auténtico tesoro para los biólogos evolutivos.

Modificado de https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1342937X17300527?via%3Dihub

Morir de éxito

La primera persona que grabó en un disco el canto de un pájaro fue un criador de canarios alemán llamado Karl Reich. Con esta técnica logró que sus canarios aprendieran el canto de los ruiseñores (Luscinia megarhynchos), algo que nadie había conseguido ya que las temporadas de canto de ambas especies no están sincronizadas. En 1921 conoció al genetista Hans Duncker con el que inició una serie de experimentos de reproducción a gran escala para investigar el patrón de herencia del color del plumaje. Son muy conocidos los cruzamientos que llevaron a cabo entre canarios y cardenalitos, unos paseriformes nativos de Venezuela que serán los protagonistas de nuestra historia de hoy.

Macho de Carduelis cucullata

Shakespeare no tuvo la culpa

Es una historia muy conocida. En 1890, un ornitólogo aficionado llamado Eugene Schieffelin liberó 60 estorninos pintos  importados de Inglaterra en el Central Park de la ciudad de Nueva York. Hizo lo mismo con otros 40 ejemplares un año después. Se ha escrito que los introdujo como parte de un proyecto para traer a los Estados Unidos todas las aves mencionadas en las obras de William Shakespeare. Pero este último detalle de la historia, mencionado una y mil veces, es falso. Lo único cierto es que aquella suelta puso en marcha una de las mayores invasiones biológicas conocidas en los Estados Unidos.

Tomado de https://www.allaboutbirds.org/news/the-secret-to-starling-success-its-in-their-genes/

A la sierra, ni dueña ni cigüeña

Las cigüeñas blancas (Ciconia ciconia) son, quizá, las aves más representativas de los pueblos de buena parte de España, con sus grandes nidos adornando el campanario de la iglesia. De los conocidos refranes que protagonizan estas zancudas, el que da título al artículo de hoy es tan poco conocido como acertado y alude a su desapego por los bosques y las montañas. La generalización de basureros de residuos sólidos urbanos en España ha provocado un cambio generalizado del patrón alimentario de la especie, que ha pasado de capturar sus presas en prados, charcas y lagunas, a buscar alternativas en estos vertederos. Este cambio ha tenido importantes consecuencias en su comportamiento migratorio.

Biología cuántica

Durante muchos años, la comunidad científica consideró que la biología y la física cuántica tenían poco que ver, una idea que hoy es vista de otra manera. Es posible que la mecánica cuántica juegue un papel relevante en procesos biológicos como la fotosíntesis de las plantas, la producción de radicales libres en las células o la migración de las aves. De la interacción de ambas disciplinas científicas nació la biología cuántica, de la que hoy veremos dos ejemplos concretos relativos al mundo de las aves: la sensibilidad al campo magnético terrestre y el daño oxidativo que provoca el esfuerzo de la migración.

Dibujo de Corinna Langebrake e Ilia Solov`yov

Excepción ibérica

La imagen del satélite Landsat-5 muestra una Península Ibérica perimetrada por un litoral cerrado con pocas islas de tamaño apreciable y un relieve de llanuras surcadas por ríos y compartimentadas por sistemas montañosos. Su localización en el extremo sudoeste del continente europeo proporciona un clima de transición entre el semiárido y el oceánico, con ambientes climáticos bien diferenciados, algo que no ocurre con países de igual o mayor extensión pero ubicados en otras latitudes. 

Matar a un ruiseñor

El sinsonte norteño (Mimus polyglottos), llamado también “ruiseñor” en algunos países del Caribe, es el pájaro que inspiró a la escritora estadounidense Harper Lee en la famosa obra que da título al artículo de hoy. Ambientada en un pequeño pueblo del sur de Estados Unidos durante la década de 1930, esta novela retrata a una comunidad dominada por los prejuicios raciales, la desconfianza hacia lo diferente y una justicia sin apenas garantías para la población de color. En la novela, los sinsontes son unos seres ingenuos y generosos que en palabras de uno de sus protagonistas “no hacen a otra cosa que cantar para alegrarnos. No devoran los frutos de los huertos, no anidan en los graneros, no hacen nada más que derramar el corazón, cantando para nuestro deleite. Por eso es un pecado matar a un ruiseñor”.


Islas Afortunadas

La región macaronésica agrupa los archipiélagos de Azores, Madeira, Cabo Verde y Canarias. Todas son de origen volcánico, disfrutan de un clima suave y son el entorno ideal para una variedad muy rica de especies, muchas de las cuales tienen carácter endémico. De los cuatro archipiélagos, el de las Islas Canarias es el más grande y el más oriental, situado a tan solo 115 kilómetros del continente africano. El archipiélago consta de siete islas principales y varios islotes, con una edad máxima de las rocas emergidas más antiguas de 20 millones de años.

 Laurisilva del Parque Nacional de Garajonay. Fotografía de Ángel Fernández López


Huérfanos de padre

La mayoría de los animales se reproducen sexual­mente, de modo que el desarrollo de un nuevo individuo se inicia tras la fecundación de un óvulo por un espermatozoide. Sin embargo, en el 1% de las especies animales, los huevos pueden formarse sin que haya mediado una fecundación previa. Este tipo de reproducción se denomina partenogénesis.

Cóndor de California (Gymnogyps californianus

Concierto de violín

Algunos insectos son capaces de producir sonidos frotando partes de su cuerpo (estridulación). Este comportamiento se asocia principalmente con los grillos, los saltamontes y ciertos escarabajos. El mecanismo básico de funcionamiento consta de una estructura con un borde aserrado que se desplaza sobre una superficie finamente ondulada, a modo de lima, que vibra de forma parecida al desplazamiento de una aguja de fonógrafo sobre un disco de vinilo. En el mundo de la ornitología también tenemos aves que se valen de un mecanismo análogo para el cortejo sexual.

 Saltarín alitorcido (Machaeropterus deliciosus)

El gran búho blanco

En muchas culturas, los búhos han sido considerados como los animales más misteriosos de la noche. Sus gritos tenebrosos y su mirada penetrante han llamado la atención no solo a los biólogos sino también al mundo de la literatura y la brujería. Se han asociado con la hechicería, la medicina, la climatología e, incluso, la muerte. No hay aves que hayan suscitado sensaciones tan opuestas. Según las creencias y tradiciones, han sido veneradas o temidas, admiradas o despreciadas.

Gorriones, langostas y caos

El cartel que abre nuestro artículo de hoy data de 1956 y fue usado como recurso promocional en la campaña "Cuatro plagas" de Mao Zedong para erradicar gorriones. Esta conocida historia nos muestra las consecuencias inesperadas que supone alterar el equilibrio natural de los ecosistemas. El experimento terminó en una gran hambruna que se llevó por delante la vida de 30 millones de chinos.


Cada mochuelo a su olivo

El título alude a uno de los refranes más conocidos en España. Lo usamos para indicar que, una vez desbandado el grupo, cada uno debemos volver a nuestras casas y ocuparnos de nuestros asuntos. Esta pequeña rapaz nocturna ilustra el tema de este artículo en el que hablaremos de aves y olivares.

Resurrección

Una especie que se creía extinguida pero se redescubre con posterioridad se conoce en Biología como especie lázaro. Su nombre alude a Lázaro de Betania, el personaje bíblico resucitado de entre los muertos. Sin duda, el ejemplo más famoso es el celacanto, un pez abisal que se daba por extinguido desde la época de los dinosaurios, hace 65 millones de años y que fue redescubierto en 1938 por la naturalista sudafricana Marjorie Courtenay-Latimer.

Pez celacanto (Latimeria chalumnae)

Carroñeros

Se debate entre los antropólogos si los humanos primitivos eran cazadores activos o carroñeros que aprovechaban los cadáveres de animales abatidos por grandes depredadores. Aun en el caso de que la práctica carroñera fuera ocasional, es muy posible que ya entonces nuestros antepasados aprendieran a descifrar los movimientos de los buitres para localizar restos ocultos en el paisaje.

Totovías y abubillas

Las palabras que imitan el sonido de aquello que designan se llaman onomatopeyas y son muy usadas en ornitología para poner nombre a las aves. Así ocurre con la voz, el grito o el canto en los cucos, las carracas o las abubillas. También entran en juego otros criterios como el comportamiento (picapinos) o los hábitos de alimentación (abejaruco). En otros casos nos fijamos en el color (verdecillo), el diseño (petirrojo) o ciertas singularidades del cuerpo (piquituerto). 

Abubilla (Upupa epops)

Pájaros arquitectos

Los nidos proporcionan importantes beneficios a las aves ya que ofrecen un entorno seguro en el que criar a la descendencia. A veces son tan sofisticados que exceden su función primaria de servir de primer hogar a la prole. En algunas especies los machos los construyen con esmero a la espera de que una hembra apruebe su diseño y acepte el emparejamiento.

Macho de tejedor baya (Ploceus philippinus) en su nido

Primavera silenciosa

La magnitud y extensión de las medidas de confinamiento que se impusieron en la primavera de 2020 por motivo de la COVID 19 provocaron una reducción de la actividad humana sin precedentes en la historia moderna. Este insólito escenario supuso una ocasión única para evaluar los efectos de nuestro estilo de vida en la biodiversidad.

Las palomas ocupan las calles vacías de Sarajevo (Bosnia Herzegovina). EFE/FEHIM DEMIR